Gracias a la fundación DYR las familias que se alojan en la casa Ronald McDonald tendrán la oportunidad de participar una vez por semana de sesiones de Yoga, danza o teatro, a cargo de una profesora especializada en estas disciplinas.
Cualquier opción lúdica que se organice en la casa, les permite desconectar y relajarse unas horas compartiendo una actividad diferente y divertida fuera del entorno hospitalario en el que están inmersos a causa de la enfermedad de sus hijos.